Mi perspectiva como founder sobre el récord histórico que posiciona a España como cuarto hub europeo
España rompe todos los récords: 1.950M€ en startups y mi análisis desde las trincheras
Como founder que observa este ecosistema desde dentro, los 1.950 millones de euros captados en el primer semestre de 2025 no son solo una cifra impresionante – representan un cambio de paradigma que llevo meses viendo germinar. Desde mi perspectiva construyendo MindBeamer.io, este crecimiento del 60% respecto a 2024 refleja algo que muchos estábamos anticipando: la recuperación post-crisis ha sido más explosiva de lo esperado.
Lo que me resulta particularmente relevante es cómo la inteligencia artificial ha canalizado el 40% de esta inversión. En mis conversaciones con otros founders, todos coincidimos: la IA ha dejado de ser un buzzword para convertirse en el motor real de captación. Startups como Factorial, que acaba de cerrar 200 millones de dólares con General Catalyst, y Wallbox con su Supernova 180, están demostrando que España puede competir a nivel europeo.
El contexto macro que estábamos esperando
La bajada de tipos del BCE del 4,5% al 3,25% ha sido el catalizador que muchos VCs estaban esperando para desbloquear su «dry powder». Desde mi experiencia gestionando la tesorería de mi startup, esa diferencia de 1,25 puntos básicos significa que proyectos que antes parecían inviables ahora tienen sentido económico. Los fondos internacionales como General Catalyst y Partech no están llegando por casualidad – están viendo números que funcionan.
La Ley de Startups de 2022 también está mostrando sus frutos reales. Los incentivos fiscales y la agilidad para crear empresas innovadoras que tanto criticamos en su momento por ser «demasiado lentos», ahora están generando el entorno que necesitábamos para competir con Berlín o París.
Madrid vs Barcelona: la concentración que todos conocemos
El dato del 70% de inversión concentrada en Madrid y Barcelona no me sorprende – es lo que veo en mi día a día. Las rondas promedio de 8 millones que mencionan coinciden con lo que observo en mi entorno: es el ticket sweet spot para Serie A en España. Sin embargo, lo interesante es el crecimiento del 15% en regiones emergentes como Andalucía, Valencia y País Vasco.
Málaga Tech Park está emergiendo como un hub real. He visto startups relocalizarse allí no solo por costes, sino por la calidad del ecosistema que se está formando. Eventos como Startup OLÉ Marbella ya no son anecdóticos – están moviendo capital real.
La competencia europea: donde España se está posicionando
Nuestras ventajas competitivas reales
Desde mi análisis como emprendedor en el sector, España tiene tres ventajas claras frente a Personio en Alemania o DeepL:
- Costes operativos 25-30% menores: En mi experiencia, el burn rate mensual aquí vs Berlín es incomparable
- Agilidad regulatoria: La adaptación al AI Act europeo ha sido más rápida de lo que esperaba
- Velocidad de ejecución: Sin tantas capas burocráticas, podemos iterar más rápido
Pero seamos realistas: seguimos por debtrás en tamaño medio de rondas. Los 8 millones españoles vs 15-20 millones en Alemania y Francia limitan nuestra escalada a Serie B y posteriores. Es el cuello de botella que más me preocupa como founder.
El gap de internacionalización que debemos cerrar
El dato del 18% de startups españolas escalando fuera de la UE vs 40% alemanas refleja una realidad que conozco bien. La barrera no es solo idiomática – es cultural y de redes. Competir con gigantes como Gusto o Tesla requiere un mindset global que aún estamos desarrollando.
Los retos reales que veo desde dentro
Dependencia del capital extranjero: ¿fortaleza o debilidad?
El 65% de inversión extranjera es un arma de doble filo. Por un lado, demuestra la confianza internacional en nuestro ecosistema. Por otro, nos hace vulnerables a cambios de ciclo globales. En mi experiencia levantando rondas, tener inversores locales que entiendan el mercado español es crucial para la toma de decisiones operativas.
La fuga de talento que todos conocemos
Los salarios 30% superiores en Berlín o Londres son una realidad que afecta a todas las startups españolas. En mi caso, he perdido desarrolladores senior que se fueron a Amsterdam o Berlín. Es un problema sistémico que necesita soluciones innovadoras más allá del sueldo: equity, flexibilidad, propósito.
Mi perspectiva sobre el modelo de negocio español
Lo que me parece más interesante de nuestro ecosistema es cómo hemos optimizado para la eficiencia sobre el músculo financiero. Mientras startups estadounidenses queman cash para crecer rápido, las españolas hemos aprendido a hacer más con menos. Esta mentalidad nos prepara mejor para mercados donde el capital barato no está garantizado.
El foco en SaaS para pymes, deeptech y movilidad eléctrica tiene sentido estratégico. Son mercados donde la velocidad de iteración y los costes operativos bajos pueden compensar la diferencia en recursos frente a competidores internacionales.
El salto histórico en contexto
Viendo la evolución desde 2021 (4.500M€) hasta el mínimo de 2024 (1.900M€), este rebote a 1.950M€ en solo seis meses no es casual. Representa la maduración de un ecosistema que ha aprendido a ser resiliente. Las startups que sobrevivieron al valley of death 2022-2024 ahora están en mejor posición competitiva.
Mi lectura es optimista pero realista: España ha demostrado que puede generar volúmenes de inversión competitivos. El siguiente paso es diversificar geográficamente, escalar a rondas mayores y, sobre todo, generar los unicornios que consoliden nuestra posición en el mapa europeo de la innovación.