Imagen: © Startups Españolas

🔄 La diferencia entre pivotar inteligentemente y cambiar por pánico

La verdad incómoda sobre las capacidades dinámicas

Déjame serte brutalmente honesto: si me preguntas por las capacidades dinámicas, primero te diría que es uno de esos conceptos que la mitad de los fundadores dice dominar y la otra mitad ni siquiera sabe definir correctamente. Desde mi experiencia asesorando startups en 2025, he visto demasiados emprendedores confundir «ser dinámico» con «cambiar de estrategia cada lunes». Las capacidades dinámicas van mucho más allá de pivotear cada vez que algo no funciona.

Hablamos de la habilidad real de integrar, construir y reconfigurar competencias internas y externas para adaptarse a mercados que cambian más rápido que las tendencias en TikTok. David Teece lo teorizó en los 90, pero yo lo veo todos los días: es la diferencia entre las startups que se adaptan inteligentemente y las que simplemente reaccionan en pánico.

Capacidades Dinámicas en Startups: Por Qué la Mayoría las Malentiende Completamente – Carousel Image
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Por qué importan más que nunca en el ecosistema actual

Lo que encuentro particularmente relevante es que en 2025, con la IA revolucionando industrias enteras cada seis meses, estas capacidades se han vuelto críticas para la supervivencia. No estamos hablando solo de agilidad; hablamos de anticipación estratégica.

Desde mi perspectiva, las startups exitosas desarrollan tres tipos de capacidades dinámicas fundamentales:

  • Sensing – La habilidad de detectar oportunidades y amenazas antes que la competencia
  • Seizing – La capacidad de movilizar recursos para capturar valor de esas oportunidades
  • Transforming – La competencia para reconfigurar constantemente activos y estructuras

He observado que las startups que dominan estos tres elementos no solo sobreviven a las crisis, sino que emergen más fuertes. Durante la revolución de la IA generativa, por ejemplo, vi cómo algunas startups tradicionales de software pivotaron completamente sus productos en meses, mientras otras se quedaron paralizadas.

Casos reales que vale la pena estudiar

Tomemos 🎬 Netflix, que no es precisamente una startup pero ejemplifica estas capacidades perfectamente. Su transición del DVD al streaming no fue casualidad; fue capacidad dinámica pura. Detectaron el cambio tecnológico (sensing), invirtieron masivamente en infraestructura digital (seizing) y reconfiguraron toda su organización hacia la producción de contenido original (transforming).

Pero mi ejemplo favorito es menos conocido: una startup española de logística que asesoré el año pasado. Cuando llegó la crisis de suministros post-pandemia, no se limitaron a optimizar rutas. Detectaron que los e-commerce pequeños necesitaban soluciones diferentes, desarrollaron una plataforma de micro-fulfillment y pivotaron de B2B tradicional a marketplace de logística. Eso es capacidad dinámica aplicada.

Los errores que veo constantemente

Aquí viene mi parte favorita: destruir mitos. He visto demasiadas startups que creen que las capacidades dinámicas significan «cambiar constantemente». Error garrafal. Una startup que conozco cambió de modelo de negocio cuatro veces en ocho meses. No tenían capacidades dinámicas; tenían ADHD empresarial.

Las verdaderas capacidades dinámicas requieren:

  • Sistemas de aprendizaje organizacional, no improvisación
  • Métricas que permitan decisiones basadas en datos, no en corazonadas
  • Cultura de experimentación controlada, no caos creativo

Desde mi análisis del ecosistema actual, el problema no es la falta de agilidad, sino la falta de metodología para ser ágiles inteligentemente.

Cómo desarrollarlas sin morir en el intento

Mi recomendación práctica después de años viendo startups es simple: empieza con procesos, no con intuiciones. Forma equipos multidisciplinarios que realmente se comuniquen, no departamentos estanco que compiten entre sí. Establece alianzas estratégicas que aporten capacidades que no tienes, pero hazlo de forma selectiva.

Y aquí va mi consejo más contraintuitivo: dedica el 20% de tu tiempo a revisar qué NO está funcionando en tu cadena de valor. La mayoría de fundadores solo miran lo que va bien. Las capacidades dinámicas nacen de entender qué necesitas cambiar antes de que el mercado te obligue a hacerlo.

Mi perspectiva sobre el futuro

Seré directo: en los próximos dos años, las startups sin capacidades dinámicas desarrolladas van a desaparecer. No es pesimismo; es realismo basado en lo que estoy viendo en el mercado. La convergencia de IA, cambio climático, nuevas regulaciones y transformación del trabajo remoto está acelerando el ritmo de cambio exponencialmente.

Mi análisis sugiere que las startups ganadoras de 2025-2027 serán aquellas que construyan estas capacidades como parte de su ADN desde el día uno, no como una reacción a posteriori. ¿Mi consejo final? Si tu startup no puede explicar cómo detecta oportunidades, cómo moviliza recursos rápidamente y cómo se transforma sin perder su esencia, entonces no tienes capacidades dinámicas. Tienes suerte, y la suerte se agota.