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La filial recibe respaldo provisional de la EUIPO mientras intensifica su campaña de marketing disruptivo

Frisby España intensifica su guerra mediática mientras navega disputas legales

La batalla entre Frisby España y su matriz colombiana ha alcanzado nuevos niveles de intensidad en las últimas horas. La filial española no solo mantiene su postura desafiante, sino que ha redoblado esfuerzos con una campaña de marketing provocadora que busca capitalizar la controversia para ganar notoriedad en el mercado español.

En un movimiento reciente, Frisby España ha suspendido temporalmente su plan de expansión mediante franquicias, una decisión que la empresa califica como «preventiva» para proteger a futuros franquiciados mientras se resuelve el conflicto legal con la matriz colombiana. Sin embargo, la compañía ha sido contundente al afirmar que «continuará su expansión en Europa de manera unilateral, irreversible y en conformidad con la legalidad vigente» si no se alcanza un acuerdo.

El litigio por la marca: argumentos legales y resoluciones provisionales

El núcleo del conflicto radica en la propiedad intelectual de la marca Frisby en territorio europeo. La filial española defiende que sus operaciones se ajustan plenamente a la legalidad, argumentando ante la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) que existía «mala fe» por parte de la matriz al no utilizar activamente la marca en Europa.

Este argumento parece haber encontrado respaldo inicial, ya que en las últimas horas se ha conocido una resolución provisional favorable a Frisby España por parte de la EUIPO. Este dictamen, aunque temporal, fortalece significativamente la posición de la empresa para seguir operando bajo el nombre Frisby en territorio español mientras continúa el proceso legal.

Paralelamente, la filial ha extendido una rama de olivo, proponiendo públicamente una salida negociada al conflicto e invitando a la matriz colombiana a establecer un acuerdo operativo, logístico y comercial que beneficie a ambas partes.

Panorama competitivo: rivales y alianzas potenciales

El sector de comida rápida en España presenta un ecosistema altamente competitivo donde Frisby España debe enfrentarse a gigantes internacionales y empresas locales consolidadas.

Entre los competidores más directos se encuentran cadenas como KFC y Popeyes en el segmento de pollo frito, mientras que marcas españolas como Goiko y The Good Burger dominan otros nichos del fast food. La mayoría de estos rivales operan mediante modelos de franquicia sólidos y estrategias de marketing digital consistentes, sin las controversias legales que afronta Frisby.

Un caso particular es Home Burgers, que recientemente ha propuesto una alianza estratégica para aprovechar las cocinas de Frisby España. Esta propuesta refleja un enfoque colaborativo que contrasta con la estrategia más independiente y combativa adoptada por Frisby España ante sus circunstancias actuales.

Ventajas y desventajas en el mercado español

Fortalezas de Frisby España

La controversia ha generado una visibilidad mediática que habría sido difícil de conseguir mediante canales publicitarios tradicionales. Este reconocimiento acelerado de marca representa una oportunidad única para posicionarse rápidamente en la mente del consumidor español.

Adicionalmente, la empresa muestra una notable agilidad para adaptar su oferta a los gustos locales y una capacidad de respuesta rápida ante los cambios del mercado, ventajas considerables frente a estructuras corporativas más rígidas.

La resolución provisional favorable de la EUIPO también proporciona un respaldo legal temporal que permite a la empresa continuar desarrollando sus operaciones mientras se resuelve definitivamente el litigio.

Debilidades evidentes

El conflicto con la matriz colombiana supone un riesgo legal persistente que podría derivar en pérdidas significativas si las resoluciones definitivas fueran desfavorables. Este escenario de incertidumbre jurídica complica la planificación a largo plazo y puede disuadir a posibles inversores y franquiciados.

La imagen de marca también se ve afectada, especialmente entre la comunidad latinoamericana en España, donde se han reportado manifestaciones de apoyo a Frisby Colombia y críticas a la filial española en redes sociales.

La suspensión temporal del programa de franquicias representa otro obstáculo para el crecimiento acelerado que la empresa pretendía lograr en el mercado europeo.

Un modelo de negocio en evolución

Frisby España opera bajo un esquema híbrido que combina restaurantes físicos con un fuerte componente de delivery, aprovechando las principales plataformas de reparto a domicilio. Este modelo, común en el sector, se distingue por la agresividad de su estrategia de marketing y comunicación.

La empresa había diseñado inicialmente un plan de expansión basado en franquicias, ahora en pausa, pero mantiene su determinación de crecer en el mercado español, con o sin acuerdo con la matriz colombiana.

El enfoque de marketing se ha convertido en el elemento más distintivo del modelo de negocio actual, utilizando mensajes provocadores que capitalizan la controversia para generar notoriedad. Esta estrategia de diferenciación busca destacar en un mercado saturado donde la competencia por la atención del consumidor es feroz.

Perspectiva histórica y situación actual

Frisby España fue establecida en los últimos dos años como vehículo para introducir la popular marca de pollo colombiana en el mercado español. El conflicto estalló cuando la matriz acusó a la filial de usurpación de marca, iniciando acciones legales ante los organismos europeos de propiedad intelectual.

Aunque la empresa no ha publicado cifras oficiales de ventas ni de locales operativos, fuentes del sector confirman que su notoriedad ha crecido exponencialmente en las últimas semanas, impulsada por la polémica y su estrategia comunicativa disruptiva.

Este aumento de visibilidad llega en un momento crítico para el sector de la restauración en España, que ha experimentado un crecimiento del 3,7% en el último año según datos de Hostelería de España, con el segmento de comida rápida mostrando un dinamismo particular impulsado por las plataformas de delivery.

El futuro inmediato: resolución o escalada

Los próximos meses serán determinantes para definir el rumbo de Frisby España. La empresa se encuentra ante una encrucijada: continuar su estrategia combativa o buscar una resolución negociada con la matriz colombiana que permita normalizar sus operaciones.

La presión competitiva del mercado español, donde gigantes internacionales como McDonald’s, Burger King y KFC continúan expandiéndose agresivamente, añade urgencia a la resolución del conflicto para que Frisby pueda centrarse en su crecimiento real.

Mientras tanto, la filial española continúa capitalizando la controversia para acelerar su posicionamiento, navegando con estrategia las complejas implicaciones legales y de reputación. En un sector donde la diferenciación de marca y la agilidad de respuesta son factores críticos para el éxito, Frisby España ha optado por convertir un conflicto legal en una oportunidad de marketing, demostrando que en el competitivo mundo de la restauración, incluso las crisis pueden transformarse en ventajas competitivas si se gestionan con audacia.